Cd. Juárez, Chihuahua. México .

Marzo 26 de 2017    

 
 
 
https://www.facebook.com/tacoschinampaep
http://www.chihuahuapost.com
http://www.chihuahuapost.com
http://www.chihuahuapost.com

Los Malosos ...


*.- Parar a López Obrador, misión de Del Mazo

*.- Elección de 2018 será un calvario para el PRI

Es mentira de a kilogramo la versión de que, 6 años atrás, el entonces gobernador Enrique Peña Nieto pidió a su pariente Alfredo del Mazo aguantar un sexenio porque necesitaba garantizar el triunfo con Eruviel Ávila en el Estado de México para estar él, a su vez, en condiciones de ser candidato presidencial.

La sucesión mexiquense de 2012 pasó por la recuperación de Ecatepec, y nadie que no sea Eruviel podía hacerlo. En realidad, Peña Nieto no tuvo problema para decidir entonces, pero, además, las circunstancias lo colocaron en posición de hacer lo que a él convenía. Nada hubo que lo comprometiera a hacer una promesa semejante.

En 2011, Eruviel se ganó el derecho, y en 2017 lo hizo Alfredo.

No obstante, Del Mazo no debe dormirse en sus laureles ni creer que tiene ganada la gubernatura del Estado de México sólo porque su nombre sea el más conocido por sus paisanos porque su pariente, el Presidente, lo apoyará con todo y porque a su carta jugará Eruviel la gran apuesta de su vida: La candidatura presidencial.

Alfredo debe entender que su misión no tiene que ver con igualar al abuelo o al padre, lo que vendría a ser, en todo caso, un problema de diván de psicoanalista, sino que se trata de una aventura política cuyo resultado incidirá, irremediablemente, en la elección del 2018; su verdadera misión es dar el primer golpe a Andrés Manuel López Obrador.

Ya es candidato a gobernar a los mexiquenses y lo primero que debe hacer es dejar en el baúl de los recuerdos familiares a los 2 anteriores que con el mismo nombre gobernaron; su misión es ganar o ser recordado como quien puso el penúltimo clavo en un ataúd del que el PRI ya no saldrá jamás por más que su primo, Enrique Peña Nieto, sea vivo ejemplo de que no hay derrotas para siempre, pues él lo sacó de la tumba en 2012.

Más allá de las especulaciones sobre las razones que empujaron su candidatura, lo cierto es que nadie le puede negar trabajo de partido y experiencia en la administración pública, necesarios para gobernar una entidad como la mexiquense.

Quizás no iguale en parafernalia a su contrincante panista, Josefina Vázquez Mota, ex candidata presidencial, ex secretaria de Educación y Desarrollo Social, y ex coordinadora de los diputados panistas, pero en el terreno mexiquense la aventaja sensiblemente, al igual que a la candidata de Morena, Delfina Gómez, que en realidad sólo es el rostro tras el que se oculta el verdadero candidato a gobernador, Andrés Manuel.

Que sea pariente del Presidente de la República puede ser materia de crítica política y periodística, pero en la vida real ayudará porque está claro que todo el aparato gubernamental federal apostará a su triunfo.

Y el estatal también, pues en el éxito de su proyecto radican las posibilidades de Eruviel Ávila para competir con Miguel Osorio Chong, José Narro, Luis Videgaray y Aurelio Nuño por la candidatura presidencial.

Lo único que importa no es que su familia rompa la marca de tener 2 gubernaturas; su misión es poner en su lugar a López Obrador. Si no lo consigue, la elección de 2018 será un calvario para el PRI.

<< Regresar

IMPRIMIR